En el norte se ubicaban los pueblos de los nobles donde se encontraba el castillo del rey, donde vivían los grandes guerreros, entre los cuales se destacaba el padre de Felipe, un guerrero de la más alta clase, pero acá nos importa es Felipe…

Él era un joven de 19 años, un escudero como dije antes, tenía un caballo llamado Argento que siempre lo acompañaba, el cual era de color blanco, brillaba como la plata y fue un regalo de los elfos a su padre y de este último a Felipe…

Felipe era bueno con las espadas, excelente jinete, pero quería ser un caballero y esto solo se podía lograr a los 21 años. Sintiéndose inconforme, decide tomar un viaje para abandonar su país y empezar un viaje para convertirse en caballero. Entonces, decide ir a recibir la bendición de sus dioses, recorre el bosque en su caballo, y va por la iglesia que estaba apartada del pueblo, después de todo, era un hombre fiel a su patria y a sus creencias.

Al volver, encuentra destruida su tierra, y en la distancia, logra distinguir a un hombre, “Solo sobrevive el rey…” – Pensó Felipe. Su familia había muerto, y no habían sido tratados con el respeto que merecían, a pesar de su lealtad al rey… Felipe entra en cólera y su ira lo hace detestar a los reyes y promete nunca más servir a uno… Sin decir una sola palabra a nadie, se retira del reino, el cual fue arrasado por una fuerza desconocida…

  • “Lo que hagamos en vida tiene eco en la eternidad…“ Diciendo esto, Felipe se marchó hacia el sur…

Los humanos quedaron sin un reino para su rey, y perdieron al más valioso de sus guerreros, Felipe, el cual aún era un simple escudero.

Felipe toma su corcel Argento que fue con el que tomó la bendición, y se marchó con su espada y su escudo, que lo hacían reconocido de su tierra natal…

Después de que se marchó, el rey tomó por traición a todos aquellos que no se reportan después del desastre… Y hasta posibles causantes de la tragedia…

(En algún lugar)

  • Reporte.
  • El pueblo fue destruido señor.
  • Excelente. ¿Murieron todos?
  • El rey sigue con vida.
  • ¿Y los caballeros?.
  • Todos muertos.
  • Ahora no hay quien interfiera… Esperemos que los demás hayan cumplido con su parte para poder facilitarme las cosas…